El teléfono celular de Fernando André Sabag Montiel, el atacante que intentó asesinar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, fue bloqueado aparentemente en uno de los intentos realizados por las fuerzas de seguridad para extraer información, por lo que esa prueba clave para la investigación corre serio riesgo de perderse.
Para explicar lo ocurrido fueron citados a declarar hoy domingo los dos técnicos de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) a los que les apareció la leyenda: “Teléfono reseteado de fábrica”, lo que implica que se borró toda la información. El hecho ocurrió horas después de que el aparato hubiera sido manipulado por personal de la Policía Federal Argentina (PFA), que fue la primera fuerza en intentar extraer información.
Desde el juzgado a cargo de la causa desconocen hasta el momento el alcance del evento, por lo que no pudieron determinar aún si se podrá recuperar la información.
Además, descartan que el teléfono haya podido ser intrusado de forma remota porque permaneció en modo avión desde que fue secuestrado, por lo que sospechan que el reseteo pudo haberse producido por la multiplicidad de intentos de acceder al mismo.
No obstante, hay información del teléfono a la que el juzgado ya accedió: la que está almacenada en la tarjeta Sim.