El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, inauguró el Polo Industrial de la Unidad Penitenciaria (UP) N° 1 de Olmos, uno de los más grandes de Latinoamérica, donde los internos del penal trabajan en la producción de todos los componentes implementados en el kit del Plan Qunita.
Participaron de la apertura el ministro de Justicia Julio Alak, el ministro de Salud Nicolás Kreplak, el de Trabajo Water Correa y el responsable del área educativa Alberto Sileoni. El plan fue elaborado conjuntamente con el Ministerio de Producción, que desarrolló la línea; la Comisión de Investigaciones Científicas que certificó la calidad; la Fundación Banco Provincia, que aportó maquinaria para carpintería; y las áreas de Trabajo y Educación, que crearon centros de formación específicos.
Además de la UP de Olmos, el programa se establecerá en otras tres plantas en más de 1200 mts2, en las unidades penitenciarias N° 8 de Los Hornos, N° 32 de Florencio Varela y N° 47 de San Martín.
Durante la inauguración, Kicillof expresó: “Alguien dijo que para conocer como es una sociedad hay que ir a ver cómo son sus cárceles, así que era menester transformar de raíz el sistema de cárceles. Cuando asumí había 51 mil internos con 24 mil plazas; un hacinamiento de más del 106%, que produce más reincidencia”.
En ese sentido, el gobernador explicó que “cuando los internos cumplen y salen de una condena, no salen con más capacidad de brindar un servicio, sino que salen de un maltrato y de ese maltrato salen reincidiendo. Así que el sistema tenía que cambiar”. Según detalló, durante su gestión los niveles de reincidencia bajaron a la mitad: “Pasamos de un 45% aproximadamente al 22%”.
Por su parte, el ministro Nicolás Kreplak, destacó el “proceso virtuoso de las políticas de Estado que piensan en los que más necesitan”. “Estamos recorriendo una fábrica que ya está produciendo con los mejores estándares de calidad y cuidado”, agregó.
Kreplak también se refirió al Plan Qunita y dijo que se trata de “una política muchísimo más importante que una cuna”, en tanto que la entrega de los kit comprometerá a las maternidades a realizarse controles periódicos en los Centros de Salud. Según informó, los kits “llegarán a 90 mil niños y niñas que nacen cada año en la provincia de Buenos Aires”.