Se detectó la presencia de una babosa australiana en la Costa Atlántica argentina que causó alarma, en particular en Mar del Plata, Villa Gesell y Pinamar, debido a que posee toxinas que pueden resultar mortales para los animales que las ingieran, usualmente perros.
Se trata de la ‘Pleurobranchaea maculata’, una especie que mide entre 2 y 15 centímetros y que es poco frecuente que aparezca en la Costa Atlántica ya que proviene de Nueva Zelanda, el sureste de Australia, China, Sri Lanka y Japón, pero por una combinación de vientos y marea, terminó en las playas argentinas.
“La recomendación es no dejar que los animales consuman ningún molusco que encuentren y consultar ante cualquier signo tanto gastrointestinal como nervioso”, explicó desde Mar del Plata el veterinario Juan Di Paolo.
La babosa moteada, tal su nombre común, contiene en su cuerpo una alta concentración de una toxina mortal llamada tetrodotoxina (TTX). La ingesta de tan sólo 1 o 2 miligramos de esta sustancia puede ser también mortal hasta para los humanos. Después de los primeros síntomas, los animales pueden ser tratados por un veterinario profesional hasta incluso sobrevivir, pero depende la cantidad ingerida.
Fuente: C5N