Como cada 2 de abril, y a 41 años del inicio del Conflicto del Atlántico Sur, el Gobierno y el pueblo argentinos honran a nuestros compatriotas que combatieron con valor y heroísmo por la recuperación del ejercicio efectivo de la soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes.
Recordamos en esta fecha a aquellos combatientes que dieron su vida por la Patria, y reafirmamos la voluntad de seguir acompañando a los familiares de los caídos en el dolor por su pérdida, destacando orgullosamente, al mismo tiempo, a quienes se pusieron a disposición de la patria defendiendo su territorio, asumiendo sobre sí las huellas dejadas por el conflicto armado. Es nuestro deber mantener este compromiso de memoria y acompañamiento para con las veteranas y los veteranos, los caídos y sus familiares.
Cabe recordar que en 1982, al momento de las hostilidades en el Atlántico Sur, nuestro país estaba gobernado por una dictadura militar, ilegal e ilegítima, que actuó de espaldas al pueblo argentino y apartándose del compromiso tradicional de la Argentina con el principio de arreglo pacífico de las controversias internacionales y, en particular, con la búsqueda de una solución pacífica de la cuestión de las Islas Malvinas.
El conflicto de 1982 no alteró la naturaleza de la controversia de soberanía entre la Argentina y el Reino Unido por las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, que continuó pendiente de negociación y solución. Es así que, durante el período de sesiones de la Asamblea General iniciado en septiembre de 1982 se aprobó la resolución 37/9, que, recordando las resoluciones 2065 (XX) y 3160 (XXVIII), solicitó a la Argentina y el Reino Unido que reanuden las negociaciones a fin de encontrar a la mayor brevedad una solución pacífica a la disputa de soberanía, y reafirmó la necesidad de que los dos gobiernos tengan debidamente en cuenta los intereses de los habitantes de las Islas Malvinas.
En contradicción con los pronunciamientos de la comunidad internacional, el Reino Unido ha intentado invocar el principio de la “libre determinación” de los pueblos en la cuestión de las Islas Malvinas. Dicho principio no resulta aplicable en tanto la composición de la población de las Islas es el resultado de la colonización iniciada por el Reino Unido en 1833, quien luego de ocupar por la fuerza el territorio y expulsar a las autoridades argentinas, implementó medidas para implantar súbditos británicos, con el propósito de definir una composición demográfica de las Islas a la medida de sus intereses coloniales.
Este año los argentinos y argentinas conmemoramos también 40 años de democracia ininterrumpida. De manera permanente, a lo largo de todos los gobiernos democráticos, la República Argentina ha rechazado el uso de la fuerza y se ha mostrado dispuesta a la negociación bilateral como medio de alcanzar la solución pacífica de la controversia, haciendo escuchar su reclamo tanto en sus relaciones bilaterales como en los foros multilaterales y regionales.
El Gobierno Argentino no claudicará y continuará impulsando políticas de Estado en el marco del mandato establecido en la Disposición Transitoria Primera de nuestra Constitución Nacional, que refleja el sentimiento de todos y todas los argentinos y argentinas.
Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto – Argentina