Redacción PBA
Escuchá el artículo:El negocio de la droga en el porteño barrio de Mataderos desbordó hacia La Matanza
La guerra entre bandas narcos que intentan copar el Barrio Las Antenas, en Lomas del Mirador, partido de La Matanza, es un desborde hacia el otro lado de la General Paz de la sangrienta guerra interna de la barra brava del Club Nueva Chicago, que desde hace una década muestra a tres facciones conocidas por el nombre de los barrios en los que viven sus integrantes (dos en Caba y uno en La Matanza).
Ese triple enfrentamiento entre los integrantes de Los Perales (nombre del barrio que está pegado a la cancha de Chicago, en el porteño barrio de Mataderos), Ciudad Oculta (nombre la Villa 15, también ubicada en Mataderos) y la parte de la barra de Chicago denominada Las Antenas, en Lomas del Mirador, no es sólo por controlar la tribuna, sino, principalmente, por pertenecer como “custodios” a diversas bandas de narcos.
Según contó el periodista Gustavo Carabajal, en La Nación, hace pocos días, la situación de estos enfrentamientos se actualizó en los últimos meses. En un afiche repartido por los vecinos de Las Antenas se expresaba lo siguiente:
“Gente esto está pasando en el complejo 19 de los monoblocks. La banda del Tribunero de Chicago bajó con la gente de Chaki Chan a tomar ‘El 19′ para vender pasta base, alita de mosca y faso. Les pegan a los pibes y les roban los celulares. Dijeron que, supuestamente, van a cuidar el barrio, pero no es así. No queremos a gente de otro lado. Vamos a denunciarlos con videos. Chaki Chan quiere copar el barrio y los trajo”. No vamos a parar hasta que se vayan”.
Además, participa el grupo Ciudad Oculta, de la Villa 15, también de Mataderos; la violencia en la hinchada de un club permeable a la acción de la política
POLÍTICA Y BARRAS, UNA DÉCADA ATRÁS
Según publicó Olé en 2012, la guerra interna en la barra de Chicago empezó con la muerte a balazos de Agustín Rodríguez, de Los Perales, luego de una reunión entre esa facción, la de Las Antenas y la de Ciudad Oculta, insólitamente organizada por Antonio Fusca, que en ese momento acababa de asumir como presidente de Chicago.
Fusca llegó a la presidencia con el apoyo de Las Antenas , lo más importante, con la venia del entonces legislador del PRO Cristian Ritondo, hombre fuerte en Mataderos que se vanaglorió públicamente del triunfo de su “amigo Fusca”.
El amigo de Ritondo, siempre según Olé en su momento, sostuvo que “no me importa la seguridad. Yo quiero salir campeón. La seguridad me chupa un huevo”, les dijo Fusca a los barras, de acuerdo con una grabación de su propia voz que se conoció entonces a través de Radio La Red.
Enterados de la situación y del encuentro, los miembros de Las Antenas se acercaron al polideportivo del club y allí se armó la primera trifulca, en la que Aldo Barralda, alias “El Paraguayo”, uno de los líderes de Las Antenas, recibió un puntazo en el abdomen.
Tras cargar a Barralda en una Kangoo gris, los de Las Antenas persiguieron a sus adversarios y alcanzaron a Rodríguez en San Pedro y Lisandro de la Torre, a tres cuadras de la sede del club. Tras golpearlo entre tres, un cuarto hombre que bajó de una moto le dio un fierrazo en la cabeza, en lo que fue el impacto mortal.
SIGUIÓ A LO LARGO DE LOS AÑOS
Dos años después, según informó la Agencia Télam en ese momento, llegó la venganza de Los Perales, con cinco heridos de bala en un enfrentamiento entre ellos y Las Antenas, todos internados cerca de donde fue la batalla a balazos, en plena CABA, en el Hospital Santojanni de la ciudad de Buenos Aires.
Uno de los barras fue herido en el abdomen, otras dos personas fueron baleadas en los brazos y dos más en las piernas.
Todos los heridos eran de la fracción de la barra `Las Antenas`, que ocupan un sector en la cancha junto a sus pares de la zona de Villegas.
UNA PAZ POLÍTICO-POLICIAL
Cuando a fines de 2015 asumió Cristian Ritondo como Ministro de Seguridad Bonaerense a cargo de la policía, se firmó una “tregua” y aparentemente “la paz” llegó a las barras.
Ritondo nombró jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad bonaerense a Marcelo Rocchetti, según consignó Nicolás Balinotti en La Nación, un reconocido abogado penalista que defendió en una causa a Rafael Di Zeo, el líder de la barra de Boca.
Ritondo ya le había confiado a Rocchetti otro rol jerárquico: fue jefe de seguridad de la Legislatura porteña cuando el ministro estaba a cargo del cuerpo legislativo, donde en su numerosa plantilla también habrían figurado conocidos barras.
Según testimonios, hubo un acuerdo entre los barras que controlaban Las Antenas y los barras que controlaban Los Perales, con la venia de los barras que controlaban Ciudad Oculta, de “no invadirse” en sus negocios.
Los de Las Antenas, de La Matanza, preservaban su autonomía y los porteños Los Perales y Ciudad Oculta mantenían interrelacionados sus circuitos de “cocina y venta” de drogas.
Pero en 2019, con el cambio de gobierno nacional y provincial, como obedeciendo a una orden, rápidamente “la paz” no sólo desapareció, sino que la guerra comenzó a intensificarse velozmente.
Así lo relató poco después el diario Crónica: “El famoso acuerdo de Mataderos, firmado por todos en 2016, ya es historia. Un pacto que duró un suspiro y una interna que también se mueve según la necesidad de algunos dirigentes porteños que necesitan “militantes” para las pintadas o para los actos políticos a la hora de las campañas.
En los últimos meses, al calor de la precandidatura del opositor Ritondo como gobernador de la Provincia de Buenos Aires de la mano de Patricia Bullrich, recrudecieron los intentos de “invadir” Las Antenas por parte de Los Perales y Ciudad Oculta, una situación que genera la inseguridad que los medios muestran y que golpea al oficialismo.
Es entonces cuando el narco apodado “Chaki Chan”, viejo conocido de la policía bonaerense desde 2016, convocó a barrabravas de Nueva Chicago para “tomar el barrio”.
Esta es una historia lamentablemente abierta que tendrá más capítulos.
